sábado, junio 30, 2012

Náusea social

Aunque no siempre, ni mucho menos, tenga lugar el vómito, la náusea ofrece la sensación de que el contenido estomacal se va a arrojar a través del esófago y finamente por la boca. Por tanto, no siempre que se tienen náuseas se vomita, pero siempre que se vomita suelen anteceder náuseas.

En el mundo en general y en España muy en concreto, creo que se está preparando una náusea social. Esto es, hay síntomas de que algo importante puede sobrevenir. Hablo, como es lógico, de sucesos en todo caso dentro de la legalidad vigente y en una línea inequívocamente civilizada. Pero que se nota que están dando vueltas por el estómago colectivo, como si quisieran abrirse paso para eliminar esa nefasta sensación de gran malestar cuya alarma es la náusea, la náusea de millones de ciudadanos que asisten, atónitos, al espectáculo de ver recortados derechos y calidad de vida y, a la par, ver cómo se soba el lomo a los más poderosos.

Las herramientas con las que el estado de derecho dota a la ciudadanía pueden tumbar, legal, legítima y civilizadamente, a cualquier gobierno salido de las urnas pero que incumpla de manera abrupta sus promesas anteriores y ponga en marcha una regresión social histórica. La percepción (o imagen) y el valor que a ella le dan los individuos (imagen valorada, o actitud) son conceptos que inexorablemente pasan factura a quienes, desde la política, no los tienen en cuenta.

El gobierno del PP todavía está a tiempo de frenar, pensar y revocar una serie de acciones que, a todas luces, son rechazadas por una importante mayoría del agregado social, incluyendo a bastantes votantes conservadores. El propio presidente del gobierno español acaba de contrastar en carne propia como el socialista Hollande y sus apoyos de la izquierda continental, con un camino alternativo europeo para superar la crisis sin castigar a los más débiles, ha echado una importante mano a España. Merkel (y sus grupos de presión) ya están empezando a ser relativamente equilibrados por esa otra solución política que, caso de Francia, terminará triunfando en todo el viejo continente.

Reitero, Rajoy debe parar. E incluso debe revocar muchas de las medidas que ha puesto en marcha. Para evitar la náusea social. Y el posible vómito posterior. Porque el cuerpo social no aguanta tanto castigo sin, de manera natural, reaccionar. De no dar marcha atrás el gobierno, los partidos inequívocamente progresistas y los sindicatos de clase, lo tendrían muy fácil.

sábado, junio 23, 2012

El nudo gordiano del sistema


A estas alturas, se ha hablado tanto de la crisis, que ya hay materia suficiente para cientos -o miles- de tesis doctorales. Las celebérrimas sinergias, son tan variadas y numerosas, que la fecha de 1929 comienza a peligrar en cuanto a su liderazgo de situaciones nefastas del sistema, del capitalismo. 

Sin tratar de ser simplista, creo que, en términos de modelo político, el actual cataclismo puede reducirse a dos posturas o puntos de vista sociales. Los cuales, de otra parte, son ya históricamente irreconciliables: los posicionamientos conservador y progresista, respectivamente. Y cada uno de los dos, hay que recordarlo, existe a costa de la supervivencia del otro, del antagonista. 

En estos momentos, apartando la filfa artificial que representan muchos de los discursos de buena parte de los líderes políticos y sociales del mundo, acerca de la crisis, puede observarse nítidamente que las posturas conservadoras tratan de escamotear la causa esencial del estropicio, esto es, la cuasi metástasis del sistema, la cual por tanto está ya a punto de iniciar la carrera de deterioro inexorable de los órganos vitales de ese monstruo que, aunque joven (¡qué son varios siglos en la historia humana!), ha traído tanta desigualdad y explotación en el planeta. Creo firmemente que, en general, los grandes líderes sistémicos actuales son conscientes de que esto, más pronto que tarde, es altamente probable que se acabe.

Porque el capitalismo, cuando ha sido relativamente reconducido por políticas en buena medida socialistas/socialdemócratas y asimismo por otras políticas democráticas de izquierda más radicales, ha arrojado resultados muy apetecibles, si se comparan con la histórica zanja separadora de ricos y pobres: la aparición de las clases medias, singularmente en la Europa democrática. Si bien, tampoco debe olvidarse, la lectura progresista ha solido y suele decantar la asunción de que, aunque no lo desea, no es posible eliminar las desigualdades sociales con este sistema incluso en alguna medida domado. Y que, con ello, no se alcanza obviamente la libertad con mayúsculas.

Este es, quizás, el nudo gordiano (que ha de resolverse desatando, no cortando como Alejandro Magno) para el sistema alternativo buscado. Porque, si de lo que se trata es de que el capitalismo se deje llevar al quirófano para ser intervenido con cirugía invasiva, el paciente no tiene esa intención, mientras sirva de fuente de riqueza para los que lo manejan a su antojo. De manera que se presenta una única solución más, la única, que por supuesto se inscriba, en su camino, en coordenadas de democracia y libertad, aun entrecomillando estos términos.

Se trata de abordar, dentro del juego parlamentario, de la democracia representativa (desatar el nudo), un programa progresista armonizado que sirva en sus mínimos para socialistas moderados y radicales de izquierda. Y que les lleve a plantar cara y vencer a los ventrílocuos que dan voz al muñeco sistémico. Y, dentro de este ejercicio de armonía, una política de comunicación excelente que sepa transmitir poco a poco, sin sobresaltos para la ciudadanía, la bondad de la buena nueva. Dejando hígado e intereses personales en la percha de entrada de la sala de reunión de moderados y radicales embarcados en el cambio. En España, los actores son, sobre todo, dos, el PSOE e IU. Pero esta, o es una acción internacional, o corto vuelo tiene. Vamos por ello, aunque muchos no lleguemos a verlo. Quizás sí, quizás no. Pienso que no está tan lejos. Pero nadie nos lo va a regalar, en todo caso. Porque el nudo hay que desatarlo, no cortarlo.

viernes, junio 15, 2012

Los ciudadanos no pueden esperar. La democracia es de tod@s

Ya sabemos que la democracia representativa, en sociedades multitudinarias como las nuestras, es el sistema menos malo. Aunque lo dijera Churchill. Pero también sabemos y padecemos que su identificación y mezcla con el capitalismo produce enormes desigualdades e injusticias en el globo. Y consustancial a ello, en la corta vida de dicho capitalismo (sólo unos pocos siglos), ciertamente se han dado unas horrendas crisis sistémicas, verbigracia la actual, quizás -con la de 1929- la más gigantesca y probablemente, asimismo, la última por ser la que puede precipitar el final mismo del sistema. 

Por ello, es necesario, urgentísimo, buscar una alternativa mejor. Y, por descontado, estoy hablando de una solución que pase por la democracia, nunca por dictadura alguna. Y que se abrace, de manera natural, a una intensa profundización social, esto es, más (y no menos) Estado de Bienestar, más (y no menos) solidaridad, más (y no menos) igualdad e inexorablemente y por ende, más (y no menos) libertad real, que no sólo formal.

Esto, parece claro, no lo van a abordar formaciones políticas, movimientos y grupos de presión conservadores. Por definición. Esto únicamente vendrá del trabajo conjunto y armónico de partidos, sindicatos y movimientos de carácter netamente progresistas. En este país y en cualquier otro. Lo cual, de otra parte, no se presenta nada fácil, es obvio. Y es difícil plasmar esta alternativa, al menos por tres razones importantes:

Una, que debe superarse el sistema actual desde sus propias entrañas, legal, civilizadamente y sin violencia, lo cual llevará tiempo sin duda, pero así ha de ser; otra, que no pocos actores protagonistas y líderes de esta alternativa, están quizás demasiado impregnados de ciertas coordenadas del sistema a sustituir: prejuicios socialmente negativos, cultura del estatus económico, egoismo, etc.; y la tercera, que se hará necesario un movimiento internacional, lo cual, con la diversidad de intereses existente, recrudece la dificultad para alcanzar el objetivo.

En España, por añadidura, se da una cuarta y nada despreciable variable a tener en cuenta: el Estado de las Autonomías y de los más de ocho mil municipios, nos sitúa como el país europeo con mayor número de políticos (cercano al medio millón). Como ya he escrito (a modo de esbozo introductorio) en este mismo blog, ha de abrirse paso a una solución federal con cinco -o pocos más- estados. Y a una reducción municipal. En esto, el PP ha tomado la iniciativa, por aquello de hacer virtud de la necesidad económica.

En fin, empiezan a surgir las sinergias en este análisis, como el lector@ verá. Ojalá desde la izquierda, los que de verdad lo sean, además de autoproclamarse así, antepongan el objetivo general a los intereses de vía estrecha y corto recorrido. Y los que no, que den paso a otr@s. Los ciudadanos no pueden esperar. La democracia es de tod@s. Porque si no, no es democracia, sencillamente es una perversión de ella.




domingo, junio 10, 2012

La Conferercia de Prensa de Rajoy: 10 puntos para la reflexión

La comparecencia del presidente del gobierno ante los medios de comunicación a mediodía de este domingo, con intervención inicial y posteriores preguntas de l@s periodistas, entiendo que  puede propiciar una seria reflexión que intento iniciar con este decálogo:

1) El presidente ha enganchado la esencia de su discurso de hoy con el que presentó en el Congreso de los Diputados el 19 de diciembre de 2011, al filo de su investidura, donde y cuando comenzó a dar pistas de lo que se nos venía encima. 

2) Ha venido a decir, en este sentido, que él no miente porque está cumpliendo lo que, en esa época navideña, dijo que iba a hacer.

3) En la misma línea, se ha jactado de que en seis meses ha llevado a cabo una serie de reformas que considera imprescindibles para el crecimiento económico del país y la creación de empleo.

4) Ha estado en todo momento muy distante y prepotente, ha ido de sobrado, esto es, él y sus asesor@s parece que tomaron la decisión de que se presentase al ataque y no a la defensiva.

5) Ha ignorado (sorprendentemente, tampoco ningún periodista ha inquirido por ahí) que un mes antes y hacia atrás, minó el país de promesas electorales en las que decía que haría justo todo lo contrario de lo que está haciendo. Es palmario que Rajoy no ha entrado en ese jardín porque sabe que es terreno muy hostil para él y su partido. Es más incomprensible, reitero, que no hayan entrado los profesionales de la información. Nadie le ha hecho la gran pregunta: ¿Por qué ignora Vd. lo que dijo antes del 19 de diciembre, teniendo en cuenta que ese día aún no tenía el timón y por tanto la información era la misma que en campaña y precampaña? 

6) Rajoy, de todas formas, creo que -impostación aparte- sabe que está poco menos que amortizado como presidente de un gobierno que no va ser capaz, según declaraciones propias, de rebajar el paro en toda la legislatura, pero sí de (incumpliendo sus promesas) estrechar más y más la calidad de vida de los ciudadanos.

7) Si con este panorama, el PSOE sigue amagando pero no dando, su secretario general no creo que llegue a tener oportunidad clara de ser el próximo candidato de su partido a la presidencia del gobierno. Además, como ya tengo escrito desde hace tiempo, ni él ni cualquier otr@ posible candidat@ que haya perdido clamorosamente en los dos últimos comicios de este país, deberían presentarse. Es tan elemental, que me cuesta creer que no se percaten de ello.

8) Esta crisis nos indica (esto, como es obvio, tampoco ha sabido o querido abordarlo periodista algun@ en la comparecencia dominical de Rajoy) que el paradigma sistémico está realmente roto, aunque formalmente se enmascare el deterioro. Siempre cabe el que, políticos avispados, se adelanten al estropicio y se unan a una vorágine ciudadana que, legal y civilizadamente, creo que más pronto que tarde impulsará una política descaradamente social y una democracia vacunada contra su propia perversión.

9) Partidos políticos, sindicatos y otros movimientos progresistas, en mi opinión no han de esperar más para armonizar una alternativa pacífica al mentado paradigma. Y quien no quiera anteponer este gran objetivo a sus objetivos domésticos, quedará invalidado. Aviso a navegantes. Esta crisis, al menos tiene algo muy bueno e importante (en línea con Einstein): puede y debe servir para alumbrar un país social y de derecho, con profunda democracia y donde los elementos malignos del actual sistema desaparezcan.

10) Dicho todo lo cual, la conferencia de prensa del presidente Rajoy ha estado bien preparada por su equipo, con algunas imperfecciones corregibles. Los periodistas, en general, me han defraudado.  Espero que dentro de unos años, un evento mediático cuyo protagonista sea el primer ministro del país, tenga otras circunstancias y, de paso, más finura periodística.

viernes, junio 01, 2012

La suicida tentación de controlar los medios de comunicación

Comparativamente con la historia de este planeta, la historia de sus habitantes humanos es como la punta de un alfiler. Y, dentro de este corto periplo del animal social, sólo podemos hablar de poco más de tres siglos (con el precedente de los Avisos de la Edad Media) de historia de los medios de comunicación de masas. 

Pues bien, nunca han faltado ni faltan múltiples tentaciones de los gobiernos de turno y/o grupos financieros poderosos para controlar los contenidos de la prensa, radio, televisión... Es cierto que puede notarse, desde un análisis riguroso, que ese tic se da más cuando gobiernan partidos con ideario muy ajeno a la puesta en práctica del binomio irrompible libertad/igualdad. Pero de todo puede uno encontrar, para qué vamos a engañarnos. Como la celebérrima película protagonizada por Marilyn Monroe, la tentación vive arriba. El poder siempre siente esa tentación con respecto a la comunicación/información dirigida a los ciudadanos. Ahora y aquí, en este país llamado España, invito a analizar, con seriedad, si sucede lo antedicho.

Sin embargo, lo he escrito y dicho hasta la saciedad, el medio de comunicación que goza de relativa independencia, nunca será nocivo para quienes no tengan una conducta retorcida, incluidos los partidos políticos, claro. Mientras que los medios domesticados, en realidad, dejan de cumplir el ilegítimo objetivo por el que un día fueron intervenidos, pues lo único que hacen es reforzar públicos incondicionales del partido controlador. Y, en los diferentes comicios, cada individuo vota sólo una vez, naturalmente, por mucho fervor que tenga.

Cuando todo lo anotado, por añadidura, sucede en medios públicos (televisión y radio), entonces estamos ya ante un caso de auténtica perversión de la democracia. Así que, con la gigantesca tormenta que tenemos encima, más valdría que la tentación no se tornara en unos medios de comunicación impropios de una democracia con calidad. Controlar esa tentación es ser demócrata, que es mucho. Lo contrario, ya se sabe...

A quien corresponda.